¿A dónde vamos cuándo no prestamos atención?

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Instituto Hispánico de Murcia - ¿A dónde vamos cuándo no prestamos atención?

En este artículo conoceras las expresiones más conocidas cuando no prestamos atención a lo que nos dicen.

La Capacidad de Atención Humana

El ser humano tiene una capacidad de atención reducida, entre unos 15 y 20 minutos. Después de este tiempo, nos llega un primer pensamiento:

¿Qué comí ayer? No lo recuerdo. ¿Cómo es posible?

El Mundo de la No Atención

Y una vez desatado el primer pensamiento, no hay vuelta atrás. Quedan abiertas las puertas de los mundos de la no atención y el camino de vuelta no es tan fácil. Que pregunten a los profesores. En sus años de formación, todo buen profesor ha tenido que enfrentarse alguna vez al mundo de la no atención. Se trata de una durísima prueba durante la cual el aspirante a profesor debe entrar en el mundo de la no atención y volver por su propio pie (o sea, sin que nadie lo despierte). No todos lo logran. Pero es una prueba muy útil para detectar a estudiantes en estos espacios desconocidos.

En Babia

Uno puede estar en Babia si le gusta mucho España. Babia es una comarca leonesa que existe de verdad y que debe de estar llena de estudiantes que no prestan atención. Seguro que tú conoces a algún estudiante que vino de Erasmus y se quedó en Babia para siempre, porque Babia es un lugar muy atractivo para gente que está muy ocupada. Esto les ocurrió a los reyes de León durante la Edad Media. En Babia estaba su residencia de verano y, por eso, cuando alguien buscaba a los reyes en León, se decía que estaban en Babia, totalmente relajados y sin querer prestar atención a las peticiones y necesidades de sus súbditos.

Desde que sabe que tiene que mudarse a Madrid, Sonia está en Babia. No piensa en otra cosa.

En la Inopia

Otro lugar interesante para estar distraído es la inopia. Las personas despistadas o que nunca se enteran de nada suelen estar en la inopia. Esta última palabra tiene su origen en «in-ops» que significa «sin riqueza» y hacía referencia a las personas pobres, las que viven apartadas de la sociedad y, por tanto, nunca se enteran de lo que ocurre.

Como siempre está en la inopia, Andrés siempre pierde las buenas oportunidades de trabajo.

Pensar

En el Séptimo Cielo

A veces, para llegar a estos lugares, hay que recorrer una larga distancia, como ocurren con los despistados que están el séptimo cielo. Tras escalar del primer al séptimo cielo, entran en un gran estado de felicidad que no les deja pensar en otra cosa. El séptimo cielo es, en la tradición religiosa, el destino final de las almas, a donde van a descansar y ser felices para siempre.

Desde que Darío tuvo a su hijo, está en el séptimo cielo, siempre sonriendo y de buen humor.

En el Limbo

Siguiendo en la tradición religiosa encontramos a aquellas personas que están en el limbo. Como sabrás, el limbo es el lugar adonde van las personas que no han sido bautizadas. Este espacio es difícil de definir: no estás en el infierno, pero tampoco en el cielo. Así, las personas que están el limbo no están prestando atención pero tampoco se quedan dormido del todo.

Últimamente Susana no presta atención en clase, abre el libro y hace como si escribiera pero, en realidad, está en el limbo.

En las Nubes y en la Luna

Cerca del limbo y del séptimo cielo encontramos a aquellos que están en las nubes y los que aspiran más alto y están en la luna. Porque la luna y las nubes son un buen lugar para esconderse, relajarse un rato y pensar a gusto en lo que queramos.

Es imposible pedir a los niños que el día de los Reyes Magos hagan los deberes. Están en las nubes pensando en los juguetes que les traerán los Reyes.

Pensando en las Musarañas

Y para terminar, aunque no es un lugar, te presento a unos pequeños roedores que viven ocultos en la tierra y en quienes piensan mucho las personas que no quieren prestar atención: las musarañas. Como son animales muy pequeños, pasan desapercibidos y podemos decir que no son muy importantes. Por eso, cuando pensamos en las musarañasestamos pensando en cosas sin importancia, de poco valor, como estos animalillos.

¡Deja de pensar en las musarañas y ponte a estudiar para el examen de mañana!

¿Y tú adónde irías?

fuente: debocaenboca

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ESCRITO POR Esther Ato

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